[L1]El versículo Lucas 24:51 describe la ascensión de Jesús. En este momento significativo, mientras Jesús está bendiciendo a sus discípulos, se separa de ellos y asciende al cielo. Este evento marca el final de su ministerio terrenal y el inicio de la nueva fase en la relación entre Jesús, Dios y sus seguidores.

La ascensión es importante en la teología cristiana porque simboliza la exaltación de Jesús y su retorno al Padre, reforzando la creencia de que Él reina en el cielo. Este acto también anticipa la promesa de su regreso en el futuro.

 [L2]Lucas 24:52 relata la reacción de los discípulos tras la ascensión de Jesús. Después de que lo adoran, regresan a Jerusalén con gran gozo. Este versículo es significativo por varias razones:

1.       Adoración: La adoración de los discípulos es una respuesta natural al reconocimiento de la divinidad y autoridad de Jesús. Ellos entienden que no solo han estado en la presencia del Hijo de Dios, sino que también han sido testigos de su gloria en la ascensión.

2.       Gozo: A pesar de que están experimentando la partida de Jesús, su reacción es de gozo. Este gozo indica su confianza en que, aunque Jesús ya no esté físicamente con ellos, su misión continúa y la promesa del Espíritu Santo está por llegar (como se indica más adelante en el libro de Hechos).

3.       Regreso a Jerusalén: Este regreso simboliza un nuevo comienzo para los discípulos, quienes volverían a la ciudad con la tarea de esparcir el mensaje del evangelio. También es el lugar donde se dará el Pentecostés, cuando recibirán el poder del Espíritu Santo.

Este versículo enfatiza el impacto espiritual de la ascensión y la transformación en la actitud de los discípulos, preparándolos para su misión futura. 

 [L3]Lucas 24:53 describe la actividad continua de los discípulos después de la ascensión de Jesús. El versículo señala que ellos permanecían en el Templo, alabando y bendiciendo a Dios. Este pasaje tiene varios significados importantes:

1.       Adoración constante: La permanencia en el Templo para alabar y bendecir a Dios refleja el compromiso de los discípulos con la oración y la adoración. Este acto de culto es fundamental en su vida comunitaria y espiritual, indicando una continuidad en su relación con Dios y un reconocimiento de su soberanía.

2.       Preparación para la misión: Este período de alabanza y oración en el Templo es un tiempo de preparación. Los discípulos se están fortaleciendo espiritualmente para enfrentar los desafíos que vendrán y para llevar adelante la misión que Jesús les confió: difundir el mensaje del evangelio.

3.       Comunión comunitaria: La acción colectiva de alabar y bendecir a Dios también muestra la unidad entre los discípulos en su fe. Estaban juntos en este tiempo de adoración, lo que ayuda a crear una comunidad fuerte y unida, esencial para la misión que les espera.

La inclusión de "Amén" al final del versículo puede interpretarse como una afirmación de fe y un cierre de esta sección, destacando la importancia de lo que han experimentado y su deseo de continuar en el camino de seguimiento a Jesús.